sábado, 11 de junio de 2011

EL EMPECINADO, pintura de Francisco de Goya


He aquí el retrato del líder guerrillero que le puso complicado al ejército de Napoleón Bonaparte cuando invadió España. Un simple campesino castellano de Valladolid que llegó a capitán general, pero que sólo mereció del rey Fernando VII el destierro a causa de sus ideas liberales y su oposición al absolutismo restaurado por el rey Borbón. . Pero en 1920 durante el pronunciamiento de Rafael de Riego vuelve a las armas para luchar contra las tropas realistas. Su nombre era Juan Martín Díez. Murió ahorcado por orden del Rey de España.

1 comentario:

  1. Después de ser objeto de escarnio durante tres años, sacado los sábados al mercado en una jaula y paseado delante de todo el gentío.
    El Rey felón no hizo caso de lasd peticiones de indulgencia de su madre, el Duque de Wellington y otros muchos. Dio la orden directamente.

    ResponderEliminar